Dentro de la bolsa he aprovechado una tela blanca para hacer unas separaciones interiores. He hecho tres bolsillos superiores para las llaves, la tarjeta transporte y el móvil; las cosas que deben estar más a mano. Y en el otro lado una separación grande para una carpeta y dos más pequeños para la cartera y la funda de las gafas.
La parte superior la he reforzado con una cinta para poder ponerle dos broches magnéticos y que no quedara muy abierta.
En vez de dos asas he optado por una que va de lado a lado y me resulta más cómoda. Para ello he reutilizado una cinta de un bolso que tiré porque a pesar de se de una conocida marca estaba mal confeccionado y era incómodo como él solo.
Y al final he hecho una bolsa que se adapta más a mis necesidades y que me ha costado sólo un rato a la máquina de coser, porque todo lo tenía desde hace tiempo.
Y este es el discreto resultado de mi tarde de costura. Seguro que le voy a dar mucho uso.